Primera experiencia meditativa “sería”
Publicado: 05 Abr 2021 08:22
Cuando digo “seria”, lo hago para referirme a que lo hice sin meditaciones guiadas, pensé que ya era el momento de comenzar el camino por mí mismo.
Fue anoche, cuando ya todos estaban en la cama. Me fui al salón con todo en silencio, me senté de piernas cruzadas, espalda recta y empecé a meditar. Me tomé unos segundos para observar mi cuerpo, y tranquilamente comencé a observar mi respiración. A los pocos segundos mi mente comenzaba a divagar. Me limite a observar los pensamientos que iban surgiendo, sin juzgarlos. Los observaba, los identificaba con una palabra, y volvía a mi respiración. Noté que era más fácil para mi seguir la respiración en la nariz que en el abdomen y así lo hice. Gradualmente los pensamientos fueron menguando, y cuando surgía alguno hacía lo mismo. Observarlo sin juzgar, identificarlo con un nombre, y volver a la respiración. A los 10-15 minutos mi respiración había bajado, era mucho más tranquila y difícil de notar, aunque la notaba. De vez en cuando se me escapaba un suspiro, y después del suspiro la respiración solía ir aún más lenta. Así estuve más o menos 20–25 minutos, y abrí los ojos. Había terminado mi meditación, estaba relajado, y mi sensación era muy extraña, no sabría definirla, pero era agradable. Así fue mi primera meditación en solitario.
Fue anoche, cuando ya todos estaban en la cama. Me fui al salón con todo en silencio, me senté de piernas cruzadas, espalda recta y empecé a meditar. Me tomé unos segundos para observar mi cuerpo, y tranquilamente comencé a observar mi respiración. A los pocos segundos mi mente comenzaba a divagar. Me limite a observar los pensamientos que iban surgiendo, sin juzgarlos. Los observaba, los identificaba con una palabra, y volvía a mi respiración. Noté que era más fácil para mi seguir la respiración en la nariz que en el abdomen y así lo hice. Gradualmente los pensamientos fueron menguando, y cuando surgía alguno hacía lo mismo. Observarlo sin juzgar, identificarlo con un nombre, y volver a la respiración. A los 10-15 minutos mi respiración había bajado, era mucho más tranquila y difícil de notar, aunque la notaba. De vez en cuando se me escapaba un suspiro, y después del suspiro la respiración solía ir aún más lenta. Así estuve más o menos 20–25 minutos, y abrí los ojos. Había terminado mi meditación, estaba relajado, y mi sensación era muy extraña, no sabría definirla, pero era agradable. Así fue mi primera meditación en solitario.