Samacittavagga.
33 «Bhikkhus, os digo que hay dos personas a las que no es nada fácil compensar.
“Dvinnāhaṁ, bhikkhave, na suppatikāraṁ vadāmi.
¿Qué dos?
Katamesaṁ dvinnaṁ?
A la madre y al padre.
Mātu ca pitu ca.
No habríais hecho lo suficiente para compensar a vuestra madre y a vuestro padre incluso si los hubieses llevado uno en cada hombro, hubieseis vivido así durante cien años, y les hubieseis aplicado aceites, masajeado, bañado y frotado;
Ekena, bhikkhave, aṁsena mātaraṁ parihareyya, ekena aṁsena pitaraṁ parihareyya vassasatāyuko vassasatajīvī so ca nesaṁ ucchādanaparimaddananhāpanasambāhanena.
e incluso si hubiesen orinado y defecado estando sobre vuestros hombros.
Te ca tattheva muttakarīsaṁ cajeyyuṁ, na tveva, bhikkhave, mātāpitūnaṁ kataṁ vā hoti paṭikataṁ vā.
Incluso si hubieseis conseguido que vuestra madre y padre llegasen a ser los supremos monarcas de esta gran tierra, abundante en los siete tesoros, todavía no habríais hecho lo suficiente como para compensarles.
Imissā ca, bhikkhave, mahāpathaviyā pahūtarattaratanāya mātāpitaro issarādhipacce rajje patiṭṭhāpeyya, na tveva, bhikkhave, mātāpitūnaṁ kataṁ vā hoti paṭikataṁ vā.
¿Por qué es así?
Taṁ kissa hetu?
Los padres son de gran ayuda para sus hijos: los crían, los cuidan y les muestran el mundo.
Bahukārā, bhikkhave, mātāpitaro puttānaṁ āpādakā posakā imassa lokassa dassetāro.
Pero habríais hecho lo suficiente, más que suficiente, para compensarles, si animáis, asentáis y establecéis a padres sin fe en la fe, a padres sin ética en una conducta ética, a padres avaros en la generosidad, o a padres ignorantes en la sabiduría».
Yo ca kho, bhikkhave, mātāpitaro assaddhe saddhāsampadāya samādapeti niveseti patiṭṭhāpeti, dussīle sīlasampadāya samādapeti niveseti patiṭṭhāpeti, maccharī cāgasampadāya samādapeti niveseti patiṭṭhāpeti, duppaññe paññāsampadāya samādapeti niveseti patiṭṭhāpeti, ettāvatā kho, bhikkhave, mātāpitūnaṁ katañca hoti paṭikatañcā”ti.
AN 2.32/41
AN 2.31-32 PTS: A i 61 II,iv,1-2
Kataññu Suttas: Gratitud
► Mostrar Spoiler
(Nota - reeditado: es Brahma; hay una errata al faltar la h intercalada):
Iti 4,106 Discurso con lo incluido en el mundo del Brama.
Sobre la importancia del respeto hacia los padres.
Esto fue dicho por el Bienaventurado, dicho por el Arahant, lo que yo he oído:
“Monjes, aquellas familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con el Brama. Las familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con los devas. Las familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con los mejores maestros. Las familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con los que son dignos de donativos. El nombre de ‘Brama’, monjes, se designa a su padre y a su madre. El nombre de ‘deva’, monjes, se designa a su padre y a su madre. El nombre de ‘mejor maestro’, monjes, se designa a su padre y a su madre. El nombre de ‘digno de donativos’, monjes, se designa a su padre y a su madre. ¿Y por qué razón? Porque, monjes, la madre y el padre son muy provechosos para sus hijos: los cuidan, los nutren y los introducen al mundo”.
Madre y padre son llamados “Brama”, “el mejor maestro”,
“Digno de donativos”; son compasivos
Hacia sus familias y sus hijos. Por eso el sabio
Debe venerarlos y rendirles honores,
Proveerles comida y bebida, la vestimenta y la cama,
Ungir sus cuerpos, bañar y lavar sus pies.
Ofreciendo estos servicios a sus padres,
El sabio es alabado ya en esta vida
Y después de la muerte, se regocija en el cielo."
Itivuttaka 4.106
con mettā