Sí, pero volviendo al tema del foro, que es el juego de tronos dentro de la FPMT. La carta del "Lama" Osel, no tiene desperdicio, pero es de kilómetro y medio, y no puede ponerse entera. Veamos sin embargo algunos puntos interesantes, como este en que Osel escribe:
La directiva primero me ofreció terapia, ya que, según su entendimiento, yo soy el problema, no ellos. No quieren asumir responsabilidad ni rendir cuentas por la desastrosa infancia que tuve que vivir bajo su supervisión. Algunos miembros de la directiva que están hoy ya estaban presentes en ese momento y son directamente responsables de muchas decisiones tomadas sobre mi destino, en las cuales ni mi madre, ni mi padre ni yo tuvimos jurisdicción alguna.
Osel ha estado en terapia psicológica media vida, en efecto. Por cauces cercanos he sabido de sus enormes problemas psicológicos, que le han afectado de un modo tremendo. No es ningún cotilleo, puesto que en las dos cartas se da por sentado que es así, y la directiva le indica el único camino a seguir, que es internarlo en un centro psiquiátrico durante 7 meses, lo cual es una condición para seguir pasándole la pensión que cobra de la FPMT, en calidad de reencarnación del Lama Yeshe (Osel ha vivido siempre de eso, por supuesto)
Osel, como queda claro en la carta de la directiva, es considerado por la FPMT como un enorme problema, ya que con su comportamiento (le acusan de consumir drogas y alcohol, lo cual debe ser cierto) está dando mala imagen a la secta. Hasta ahora, la política de la FPMT ha sido al parecer meter la basura debajo de la alfombra, pero ya hay tanta que la basura está a la vista. ¿Y qué es esa basura? Al parecer, es Osel, convertido en una persona enferma, con claros problemas de adaptación, a causa de las decisiones tomadas por la directiva sobre la vida que el niño Osel debía llevar, alejado no solo de su familia, sino exhibido como un animal raro por todo el mundo. ¿Y, por qué? ¡Para sacar pasta! ¿Qué, si no?
Pero ahora el animal raro se ha convertido en un verdadero problema para ellos, para la FPMT, para el Dalai Lama y para el budismo tibetano en general. No es de recibo que los Sabios lamas del Tíbet, con SS a la cabeza, se equivoquen del modo que han equivocado, ¿No es cierto? El Lama Osel está poniendo en aprietos al budismo tibetano en el exilio, que no puede equivocarse de ningún modo, cuando decide que un niño es un Lama reencarnado. Sí se toma la decisión de que lo es, es que lo es. Punto. Pero claro, si lo es, entonces estamos viendo a un Lama Yeshe disparatado y confuso (enfermo mental, posiblemente) , dando un espectáculo deplorable de cara al exterior.
¡Y esto es política, no espiritualidad! Es necesario proclamarlo a los cuatro vientos. No solo han causado daños a esa persona, sino a muchísimas más. Daños irreparables en muchos casos, que yo mismo he conocido pero no sirve de nada airearlos.